Foto por Lucía Laínz |
Y más bonito.
Es que creo que me gusta el mundo que me ofreces
y no quiero culparte a ti.
Aunque, puestos a resistir,
dime qué tipo de magia tienes en la sonrisa
que no encuentro aleación que no derritas
y al final vas a llegar a órganos vitales.
¿Eres tú, o mi temperatura de ebullición
compitiendo con el invierno de esta ciudad?
Me evaporo,
que no es más que otra manera que tienes
de hacerme volar.