viernes, 2 de diciembre de 2011

Hoy no nieva porque hace demasiado frío.

La sociedad se lanza a sentir demasiado tempranamente:
Alardeamos de haber aprendido a empezar la casa por los cimientos, pero no los dejamos secar.
Nos peleamos por querer de más en los preliminares y los "cuelgatú", a partir del mes, cansan.
Buscamos rituales y los días grises nos quejamos de la rutina. Buscamos especialidad y los sábados de fiesta nos quejamos de la exclusividad.
Empezamos investigaciones inductivas y llegamos a la tésis antes de terminar el título.
 
Así es como hemos conseguido encender la calefacción en septiembre y correr a corrernos.
Foto por Andrea González Güemes
 Pues resulta que ha llegado el frío y a mí aún no me ha dado tiempo a sentirlo. Pero esto no está del todo mal, que el invierno es muy largo.